El reino de Granada fue el único reino musulmán de la península Ibérica que existió como entidad política independiente en dos periodos distintos de la historia de al-Ándalus.
Tras la desaparición del califato de Córdoba (1031) surgió como reino taifa bajo la soberanía berebere de los Ziríes, hasta que en el año 1090 fue conquistado por los almorávides.
El reino Nazarí de Granada se volvió a formar tras el hundimiento del Imperio Almohade. Su fundador, Muhamad I (1237-1273), que pertenecía a la familia árabe de los Banu Nasr (de ahí el nombre Nazarí o Nazarita), fijó su residencia en la Alhambra. Aparte de la capital, sus enclaves más importantes fueron Málaga y Almería. Finalmente, el emir granadino se convirtió en tributario de los reyes castellanos para mantener su independencia.
Entre las razones de su supervivencia a lo largo de más de 200 años se encuentran las barreras montañosas (Sistema Penibético) que lo protegían, la ayuda de los benimerines, guerreros musulmanes llegados de África, y las crisis políticas y guerras civiles de el reino de Castilla durante el siglo XIV.
En el siglo XV se inicia un período de debilidad a causa de las frecuentes luchas entre las familias nobles que querían el trono granadino. El último rey Nazarí de Granada fue Boabdil (Abu Abd Allah), hijo del rey de Granada Muley-Hacén (Abu-l-Hasan ‘Alí), que ascendió al trono en 1482 tras una revuelta popular. En 1483 fue hecho prisionero por las tropas de Fernando el Católico y en 1486 fue restituido como rey con la condición de pagar tributos a los Reyes Católicos. Poco despues estalló la guerra civil entre los partidarios de Boabdil y los de su tío el Zagal (Abu ‘Abd Allah Muhammad), lo que facilitó el avance cristiano hacia Granada. Sitiada por los ejércitos de los Reyes Católicos desde la primavera de 1491, Granada cayó el 2 de enero de 1492. Con la toma de Granada se culmina el proceso político-militar de la reconquista.
El rey Boabdil entrega las llaves de Granada a los Reyes Católicos
Referencias: